viernes, 18 de febrero de 2011

20 de Febrero

Cada latido de nuestro corazón marca el ritmo de una poesía hecha por Dios, escuchemos con el alma las poesías presentes en las Escrituras:


Salmo 119 (1-8.17-24.33-40)


“Felices los que van por un camino intachable,

los que siguen la ley del Señor,

Felices los que cumplen sus prescripciones

y lo buscan de todo corazón

los que van por sus caminos,

sin hacer ningún mal.

Tú promulgaste tus mandamientos

para que se cumplieran íntegramente.

¡Ojalá yo me mantenga firme

en la observancia de tus preceptos!

Así no sentiré vergüenza,

al considerar tus mandamientos.

Te alabaré con un corazón recto,

cuando aprenda tus justas decisiones.

Quiero cumplir fielmente tus preceptos:

no me abandones del todo…


… Sé bueno con tu servidor,

para que yo viva y pueda cumplir tu palabra.

Abre mis ojos,

para que contemple las maravillas de tu ley.

Soy un peregrino en la tierra,

no me ocultes tus mandamientos.

Mi alma se consume,

deseando siempre tus decisiones.

Tú amenazas a esos malditos arrogantes,

que se desvían de tus mandamientos.

Aparta de mí la vergüenza y el desprecio,

porque yo cumplo tus prescripciones.

Aunque los poderosos se confabulen contra mí,

yo meditaré tus preceptos.

Porque tus prescripciones son todo mi deleite,

y tus preceptos, mis consejeros…


…Muéstrame, Señor, el camino de tus preceptos,

y yo los cumpliré a la perfección.

Instrúyeme, para que observe tu ley

y la cumpla de todo corazón.

Condúceme por la senda de tus mandamientos,

porque en ella tengo puesta mi alegría.

Inclina mi corazón hacia tus prescripciones

y no hacia la codicia.

Aparta mi vista de las cosas vanas;

vivifícame con tu palabra.

Cumple conmigo tu promesa,

la que hiciste a tus fieles.

Aparta de mí el oprobio que temo,

porque tus juicios son genuinos.

Yo deseo tus mandamientos:

vivifícame por tu justicia.” Amén.


Curiosidades


¿Qué es la Gehena de fuego?


La puerta del sudoeste de Jerusalén, abierta hacia el valle, vino ser conocida como «valle del hijo de Hinom» (Jeremías 7:31 19:2-6 y 32:35); el libro de Jeremías habla de los residentes que adoraban a Moloch, presagiando la destrucción de Jerusalén (Jeremías 32:35). En épocas antiguas los cananeos sacrificaban a niños al dios Moloch, quemándolos vivos; una práctica que fue proscrita por el rey Josías (II Reyes, 23:10). [Cuando la práctica desapareció, se convirtió en el vertedero de la ciudad donde se incineraba la basura, y también los cadáveres de animales o los de algunos criminales.

En los evangelios sinópticos Jesús utiliza la palabra gehena 12 veces para describir lo contrario a la vida del Reino prometido. Es un lugar en donde el alma y el cuerpo se podrían destruir (Mateo 10:28) en un fuego inapagable (Marcos 9:43).

Según Mateo 23:33, Jesús dice: Ustedes, serpientes, generación de víboras, ¿cómo podrán escapar al castigo del Gehena?”

La palabra gehena se encuentra también en la Epístola de Santiago. Muchos cristianos asimilan gehena como el lugar de castigo eterno llamado infierno. Por otra parte, algunos, como los testigos de Jehová, entienden el Gehena como el lugar en donde los pecadores impenitentes no guardan esperanza de resurrección, son destruidos en el Lago de fuego (Gehena): La muerte segunda. No conciben el Gehena como un lugar donde las almas sean atormentadas eternamente, sino, como un lugar de destrucción eterna (Apoc. 20:14, 15). Los universalistas cristianos, que creen que Dios salvará a todas las almas, interpretan las referencias del Nuevo Testamento al Gehena en el contexto del Antiguo Testamento, y concluyen que se refiere siempre al inminente juicio divino contra Israel y no al tormento eterno para el pecador.

El nuevo testamento se refiere al Hades como destino de los muertos o sepultura común de la humanidad, un lugar distinto al Gehena. En el Apocalipsis 20:14 se describe el destino final del Hades en un lago de fuego lo que para muchos cristianos significa lo mismo que gehena.


Evangelio


Desde el interior de las Escrituras se oyen latidos de vida, ¿qué significan esos sonidos? Escuchemos atentamente el texto bíblico de hoy:


Mateo 5:17-37


“No piensen que vine para abolir la Ley o los Profetas: yo no he venido a abolir, sino a dar cumplimiento. Les aseguro que no desaparecerá ni una coma de la Ley, antes que desaparezcan el cielo y la tierra, hasta que todo se realice. El que no cumpla el más pequeño de estos mandamientos, y enseñe a los otros a hacer lo mismo, será considerado el menor en el Reino de los Cielos. En cambio, el que los cumpla y enseñe, será considerado grande en el Reino de los Cielos.

Les aseguro que si la justicia de ustedes no es superior a la de los escribas y fariseos, no entrarán en el Reino de los Cielos.

Ustedes han oído que se dijo a los antepasados: "No matarás", y el que mata, debe ser llevado ante el tribunal. Pero yo les digo que todo aquel que se irrita contra su hermano, merece ser condenado por un tribunal. Y todo aquel que lo insulta, merece ser castigado por el Sanedrín. Y el que lo maldice, merece la Gehena de fuego. Por lo tanto, si al presentar tu ofrenda en el altar, te acuerdas de que tu hermano tiene alguna queja contra ti, deja tu ofrenda ante el altar, ve a reconciliarte con tu hermano, y sólo entonces vuelve a presentar tu ofrenda. Trata de llegar en seguida a un acuerdo con tu adversario, mientras vas caminando con él, no sea que el adversario te entregue al juez, y el juez al guardia, y te pongan preso. Te aseguro que no saldrás de allí hasta que hayas pagado el último centavo.

Ustedes han oído que se dijo: "No cometerás adulterio". Pero yo les digo: El que mira a una mujer deseándola, ya cometió adulterio con ella en su corazón. Si tu ojo derecho es para ti una ocasión de pecado, arráncalo y arrójalo lejos de ti: es preferible que se pierda uno solo de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea arrojado a la Gehena. Y si tu mano derecha es para ti una ocasión de pecado, córtala y arrójala lejos de ti; es preferible que se pierda uno solo de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea arrojado a la Gehena.

También se dijo: "El que se divorcia de su mujer, debe darle una declaración de divorcio". Pero yo les digo: El que se divorcia de su mujer, excepto en caso de unión ilegal, la expone a cometer adulterio; y el que se casa con una mujer abandonada por su marido, comete adulterio.

Ustedes han oído también que se dijo a los antepasados: "No jurarás falsamente, y cumplirás los juramentos hechos al Señor". Pero yo les digo que no juren de ningún modo: ni por el cielo, porque es el trono de Dios, ni por la tierra, porque es el estrado de sus pies; ni por Jerusalén, porque es la Ciudad del gran Rey. No jures tampoco por tu cabeza, porque no puedes convertir en blanco o negro uno solo de tus cabellos. Cuando ustedes digan «sí», que sea sí, y cuando digan «no», que sea no. Todo lo que se dice de más, viene del Maligno.” Amén.


Los textos bíblicos nos dicen cosas, pero sólo si reflexionamos sobre lo que oímos podremos escuchar los verdaderos latidos de Dios: momento de reflexión:


Al pan, pan y al vino, vino ¡nada de medias tintas! ¡nada de disfrazar las cosas!

No se puede ser dos cosas a la vez, no se puede ser cristiano y budista o creer en la reencarnación, la suerte o la energía cósmica. En ese sentido Jesús es determinante.

Tal vez te parezca duro y fuera de época. Tal vez en este tiempo en donde se busca el encuentro y la aceptación mutua a pesar de las diferencias esto te resulte demasiado duro y extremista.

Pero acá no se está hablando de los demás sino de cada uno, de cada cristiano. Si hemos aceptado a Cristo en nuestro corazón es sí o no, Jesús no acepta el so o el ni. Por eso es importante saber qué implica el ser cristiano y definir hasta qué punto somos capaces de seguirlo.

Un cristiano no puede ser corrupto, ni “llevarse algo prestado”, ni mentir aunque sea para salir del paso, y tantas cosas en las que caemos diariamente y a veces incluso denunciando y hablando de otros que hacen lo mismo que nosotros, pero a otro nivel. El robar una fruta, los cubiertos del avión, las toallas del hotel o un millón de dólares, es robar, y como cristianos no debemos robar.

El pagar una coima a la policía por una falta de tránsito, buscar un acomodo para ser atendido sin hacer la fila es tan malo como la corrupción que vemos en el gobierno o en la política. Lo mismo corre para la mentira, el maltrato y tantas cosas que minimizamos diciendo “todo el mundo lo hace”.

Ser cristiano no es algo liviano, es un compromiso diario de seguir los pasos de Jesús que luchó contra un imperio y una religión que abusaba de sus fieles, no tuvo miedo a enfrentar todas las estructuras y esa es la invitación que nos hace. Por eso la dureza de sus palabras, por eso la exigencia para con quienes lo seguimos. Pero vale la pena. Amén.


Querido Jesús, sé que a veces no estoy a la altura de las circunstancias, que prefiero seguir mi camino en vez de tratar de mejorarme a diario y renunciar a las tentaciones a las que me veo expuesta. Sé también que caminaste entre nosotros y sabés muy bien lo que es ser un ser humano y que es posible imitarte en tu vida aquí en la tierra. Dame el valor y la integridad para ser una verdadera cristiana que da testimonio de tu evangelio. Te lo pido en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

viernes, 11 de febrero de 2011

13 de Febrero

Cada latido de nuestro corazón marca el ritmo de una poesía hecha por Dios, escuchemos con el alma las poesías presentes en las Escrituras:


Salmo 112


“Aleluya!


Feliz el hombre que teme al Señor

y se complace en sus mandamientos.

Su descendencia será fuerte en la tierra:

la posteridad de los justos es bendecida.


En su casa habrá abundancia y riqueza,

su generosidad permanecerá para siempre.

Para los buenos brilla una luz en las tinieblas:

es el Bondadoso, el Compasivo y el Justo.


Dichoso el que se compadece y da prestado,

y administra sus negocios con rectitud.

El justo no vacilará jamás,

su recuerdo permanecerá para siempre.


No tendrá que temer malas noticias:

su corazón está firme, confiado en el Señor.

Su ánimo está seguro, y no temerá,

hasta que vea la derrota de sus enemigos.


El da abundantemente a los pobres:

su generosidad permanecerá para siempre,

y alzará su frente con dignidad.


El malvado, al verlo, se enfurece,

rechinan sus dientes y se consume;

pero la ambición de los malvados se frustrará.” Amén.


Curiosidades


¿Cómo aparece la palabra lámpara en el Nuevo Testamento?


En el Nuevo Testamento “lámpara” aparece 14 veces, en general como traducción del griego lampas, pero a veces también del griego lyjnos. Lampas se traduce, acertadamente, “antorcha” en Jn.18:3 y en Ap.8:10, “lámpara” en Hch.20:8, y también en Mt.25:1, 3-4, 7-8 y Ap.4:5 en los que sería más acertado traducir “antorcha”, como. Lyjnos se traduce “lámpara”, “luz” y “antorcha”, aunque la traducción más acertada sería “lámpara”.

La lámpara convencional se destinaba a interiores, y lo que se necesitaba en la parábola de las vírgenes, y que a veces se usa todavía en las bodas, era antorchas. Era necesario empapar en aceite los trapos que hacían de mecha. Parecería que las vírgenes insensatas carecían totalmente de aceite, y por lo tanto, cuando encendieron sus antorchas estas se apagaron inmediatamente. Las prudentes habían guardado aceite en recipientes separados, listo para usar en el momento apropiado. Parecería que la diferencia entre ellas no fue la cantidad de aceite que tenían, sino que una tenían, y otras no. Las insensatas podrían haber ido a comprar un poco si hubieran actuado con tiempo.

Lyjnos se emplea frecuentemente en sentido simbólico. Es la lámpara que hay que poner en un pedestal para iluminar toda la casa. Juan el Bautista fue “una lámpara que ardía y alumbraba”, que “vino para que diese testimonio de la luz”. Es Cristo quien es la luz. En Mt.6:22 se llama al ojo “lámpara del cuerpo”, porque recibe la luz de afuera.

Lyjnia se traduce invariablemente “candelero”, con excepción de Hch.9:2 en donde aparece como “candelero”. Las siete iglesias y los dos testigos están simbolizados por candelabros, similares a los usados en el tabernáculo.


Evangelio


Desde el interior de las Escrituras se oyen latidos de vida, ¿qué significan esos sonidos? Escuchemos atentamente el texto bíblico de hoy:


Mateo 5:13-16


“Ustedes son la sal de la tierra. Pero si la sal pierde su sabor, ¿con qué se la volverá a salar? Ya no sirve para nada, sino para ser tirada y pisada por los hombres.

Ustedes son la luz del mundo. No se puede ocultar una ciudad situada en la cima de una montaña. Y no se enciende una lámpara para meterla debajo de un cajón, sino que se la pone sobre el candelero para que ilumine a todos los que están en la casa. Así debe brillar ante los ojos de los hombres la luz que hay en ustedes, a fin de que ellos vean sus buenas obras y glorifiquen al Padre que está en el cielo.” Amén.


Los textos bíblicos nos dicen cosas, pero sólo si reflexionamos sobre lo que oímos podremos escuchar los verdaderos latidos de Dios: momento de reflexión:


Es curioso el ejemplo que Jesús da para que nosotros, los cristianos, comprendamos nuestra misión aquí en la tierra. Habla de sal y de lámpara. Ambas cosas son necesarias, pero se puede vivir igual sin ellas. Hay personas que no pueden comer las comidas con sal, lo mismo que una vida sin una luz artificial en la noche es posible (de hecho hay mucha gente que vive en esas condiciones.

Pero ¿qué es lo que la sal hace a la comida y la lámpara en la noche? Nos mejora la vida, le da sabor, color y orientación. Tanto la sal como la luz nocturna no debe ser mucha, con un poco la cosa cambia. Cuando la disfrutamos en su justa medida casi no nos damos cuenta de ella, pero cuando nos falta ¡cómo la extrañamos!

Se puede vivir sin la sal o sin la luz de una lámpara, así como también se puede vivir una vida sin fe. Pero le falta sabor, color, sentido. La fe es el que le da el sentido a la vida y sostiene en los tiempos difíciles.

Cuando Jesús nos dice “ustedes son la sal de la tierra” o “ustedes son la luz del mundo” nos está diciendo que somos quienes hacemos que las cosas sean diferentes, con sabor, con luz. Mi pregunta entonces es ¿por qué no atraemos? ¿por qué la gente busca otras alternativa y nos dicen que la fe no sirve para nada?

La sal que no sala o la lámpara que no ilumina no sirven. Tal vez es el momento de plantearnos acerca de nuestro testimonio como cristiano, tal vez sea hora de animarnos a ser verdaderamente sal y luz, a entregarnos, disolvernos y quemarnos para que este mundo reciba lo que Cristo nos ha dejado. Que transformemos el mundo a través del amor de Dios, ese amor que no puede vivir en una persona sino que necesita ser compartida. La sal en el salero no sala, sólo sala cuando se derrama sobre la comida. La lámpara sólo ilumina cuando se enciende, cuando se quema la lama, cuando corre la electricidad, la energía, y desgasta el foco hasta quemarlo.

Es necesario darse para que el mundo cambie, necesita de nuestra entrega, de nuestro amor y desprendimiento. Sólo hay que animarse. Amén.


Querido Jesús, me llamaste a ser sal, a ser luz, pero a veces me da fiaca, no quiero esforzarme, no quiero salir de mi comodidad. Ayudame a aceptar tu desafío, a comprender que vos estás a mi lado, que me acompañás y fortalecés en todo momento. Te lo pido en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.